En breve iniciamos un nuevo curso y me gustaría volver a insistir en la necesidad de que las familias se impliquen al máximo en el proceso educativo de sus hijos. Para ello es necesario que participen y colaboren con la escuela. No me cansaré de repetir que la familia y la escuela necesitamos establecer una alianza formando un auténtico equipo educativo: "La familia y la escuela necesitamos compartir, no competir". Es momento de dejar a un lado nuestros recelos y desconfianzas para estrechar lazos de unión por nuestros hijos y alumnos si queremos ofrecerles lo mejor.
En estos artículos que escribí hace ya un tiempo puedes leer mi opinión al respecto:
Me alegra leer noticias optimistas sobre proyectos que contribuyen a mejorar la educación: