En esta etapa se da un cambio significativo en la vida del niño:
empieza a ir al colegio. Esto le ayudará a ampliar su círculo social ya que,
hasta el momento, los padres, los familiares y amigos cercanos habíais sido su
principal punto de referencia. Es importante que tanto los padres como el niño
estemos preparados para afrontar una entrada exitosa en el colegio.
Hemos de tener en cuenta que el niño va a ir a un lugar nuevo para él
donde va a pasar un determinado tiempo con personas “desconocidas” (al menos la
gran mayoría), realizando actividades que requieren un esfuerzo y sometidos a
una serie de normas y rutinas a las que no todos están habituados…
Un aspecto a tener en cuenta es el que señala Silvia Álava:
Los niños
que previamente han estado en la escuela infantil suelen adaptarse muy bien al
centro educativo.
Debemos tener en cuenta algunas pautas para facilitar su integración y adaptación escolar:
- Es importante que le hablemos de la escuela y de lo que va a aprender allí.
- Debemos presentarle el colegio como un lugar agradable donde estará con más niños y aprenderá multitud de cosas (visión positiva).
- Desdramaticemos la situación. Como destacan Pilar Guembe y Carlos Goñi: “no seamos más infantiles que los propios niños”.
- Es importante hacer una visita al centro antes del primer día para que vean el patio, la clase, etc. y si puede conocer a su profesor/a mejor. De este modo facilitaremos el período de adaptación.
- No mostremos excesiva preocupación.
Lo importante es que los niños dispongan de la mayor
información posible sobre esta nueva etapa ya que les ayudará a afrontar ese
“miedo a lo desconocido”. Hablemos de ello con total naturalidad.
Consejos para los días previos a las clases
El inicio de las clases supone un gran cambio
en nuestra rutina cotidiana. Por este motivo es aconsejable:
- Ir adaptando progresivamente el
horario de dormir-despertar al que tendrán cuando empiece el cole.
- No dejar todo para el último
día: preparar el material, las cosas que necesita, etc.
- Entrar en contacto con los
amigos del cole: que vengan a casa, se vean en el parque, etc.
- Hablar con el niño sobre el
cole y su nueva etapa pero sin que esto se convierta en “el tema central” de
nuestras conversaciones con el niño. Lo importante es que escuchemos al niño:
sus miedos, inquietudes, preocupaciones, etc.
¿Y si no quiere ir al cole ? Adaptación
Los problemas de adaptación al cole son absolutamente normales. Hemos de tener en cuenta que para
el niño supone enfrentarse a una situación nueva: un entorno totalmente nuevo
para él donde está regido por unas rutinas y un horario establecido, donde
ha de competir por el juguete que les gusta, por la
atención del adulto con el resto de compañeros, etc.
En ese “proceso de adaptación al cole” son totalmente
normales algunas actitudes por parte del niño:
- Lloros y rabietas.
- Negación a la hora
de acudir al cole.
- Conductas
negativistas.
- Dolores somáticos
(dolor de cabeza o de estómago justo antes de salir hacia el cole).
- Problemas para
conciliar el sueño (sobre todo los domingos).
- Etc.
Esta negación a ir
al cole puede aparecer también después de un periodo en el que el niño ha
estado en casa en compañía de sus padres, o después
de las vacaciones de verano, etc.
¿Qué podemos hacer los padres?
Ante todo mostrar
una actitud serena pero firme. Nuestra obligación es mostrarle la parte
positiva de ir al cole: todos los niños van y se divierten. Lo que más
necesitan en este momento es de nuestra comprensión, que les digamos que
entendemos cómo se sienten y que confiamos en que es
una etapa que van a superar. Además, debemos mantener un contacto fluido con el
profesor o profesora del niño para ver cómo evoluciona en este periodo de
adaptación. Importante: no usar jamás el colegio como un premio o castigo (“Si vas al colegio te compraré un regalo…”)
Claves para el período de adaptación
1. Si todavía no lo ha hecho (debería) es momento de abandonar el chupete.
2. Debemos fijarle horarios y rutinas similares a los que tendrá en el colegio para facilitar su adaptación horaria.
3. Fomentar su autonomía (comer solo).
4. Control de esfínteres.
5. Despedidas rápidas paa transmitir seguridad y evitar dramatismos.
6. Entorno tranquilo. Empezar y terminar el día en un ambiente relajado y sin prisas.
7. Mantener un contacto fluido y directo con su profesor/a.
Si te parece interesante lo que escribo y comparto en mi blog puedes leer mis libros donde abordo este y otros muchos temas:
No hay comentarios:
Publicar un comentario