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martes, 24 de diciembre de 2013

Padres atentos y conscientes

Hoy estreno un apartado de colaboraciones en mi blog con un artículo escrito por una buena amiga y formadora de la Escuela de Padres con talento en Valencia. Se trata de Beatriz Montesinos, psicóloga especializada en Psicología Social y de la Educación. Experta en diseño de programas, entornos y materiales educativos con soporte de las TIC. 

Profesora y formadora durante muchos años, le interesa motivar en los demás las ganas de saber y de aprender, y encontrar las herramientas adecuadas para cada persona. 

Se define como "una aprendiz incansable, primero de sí misma, y después de los demás".

Su pasión: no dejar de aprender, compartir lo que aprende y colaborar mediante su trabajo en la construcción de un mundo más humano, donde el conocimiento y la tecnología estén al servicio de las personas para ser más felices. 

Comparto aquí el interesante artículo que ha escrito Beatriz sobre "Padres atentos y conscientes". Espero que resulte de tu interés:

PADRES ATENTOS Y CONSCIENTES

Una noche al ir a acostarme, tras un día especialmente agitado, me dio por pensar y repasar los momentos que había pasado con mis hijos. Momentos que ya no volverían a suceder…, y me di cuenta con cierto malestar que no había “disfrutado” especialmente de ninguno. Todo había sido mecánico, con una sensación de “prisa” por acabar las tareas y pasar a la siguiente: como una carrera de obstáculos.

Ese malestar me llevó a decidir que tenía que hacer algo para cambiar esa situación, y aunque llevaba ya un tiempo leyendo acerca de mindfulness (atención plena en castellano) no había tenido la oportunidad de empezar a practicarlo. Hasta que la causalidad (que no casualidad) me llevó a conocer un taller de Mindfulness para padres atentos y conscientes, y allí encontré una solución para poder acabar con el “malestar”.
He de deciros que está siendo una experiencia muy enriquecedora compartir con otros padres y madres este aprendizaje tan valioso y tan sencillo de aplicar.

Para contaros qué es exactamente mindfulness y qué nos puede aportar en nuestra experiencia como padres, le pido a mi “maestro” de mindfulness Ignasi Fayos que me cuente él de primera mano los beneficios que aporta la práctica de esta técnica, ya que él lleva muchos años trabajando como psicólogo en terapia familiar y conoce bien las necesidades de las familias.

Mucha gente tiene la idea de que "meditar" es lograr poner "la mente en blanco", pero Ignasi me comenta que la intención de la meditación no es “dejar la mente en blanco” sino más bien conocerse y cuidarse.

También existe la creencia de que la meditación es muy difícil de aplicar a una vida "normal", que para ello hay que
ser un "iluminado" o vivir apartado del mundo, pero nada más lejos de la realidad: “La vida cotidiana de una persona no cambia por practicar meditación. Uno se levanta, lleva los niños al cole, va al trabajo, charla con los compañeros, come en familia o realiza deporte, eso no cambia. Lo que si cambia es la manera en la que una persona que practica meditación, vive cada una de estas circunstancias, ya que la experiencia se hace más rica, más llena y más amable.”, me cuenta el experto.

De lo que puedo dar fe, es que la práctica de mindfulness mejora las relaciones personales y familiares, y las enriquece, porque es algo más que meditar, como explica Ignasi: “Imaginemos que alguien está con sus seres queridos, con sus hijos, por ejemplo, pero sólo de cuerpo presente, y que mientras está con ellos comiendo, charlando… su mente está constantemente ocupada con preocupaciones, planificando tareas pendientes, etc. Cuando esto ocurre la persona está con sus seres queridos a medias lo que le impide disfrutar plenamente de la relación, de la compañía, de la conversación, no será consciente de sus palabras, de sus gestos, sus emociones… teniendo un encuentro medio vacío. Y no es que la persona no tenga la capacidad de atender con presencia a su ser querido, es que simplemente estamos acostumbrados a estar a medias en la vida. Por tanto, si una persona desarrolla su capacidad de estar con atención plena –mindfulness- ante sus seres queridos vivirá estos encuentros con plenitud y le permitirán tener relaciones más auténticas y que redundarán en el beneficio de sus relaciones personales y familiares. Prestar atención plena –mindfulness- a otra persona es un acto de amor genuino que mejora la calidad de cualquier relación.”

¿Y puede haber mayor muestra de amor hacia nuestros hijos que prestarles atención plena en cada momento? Los niños no son niños toda la vida, así que conozcámonos, aceptémonos, amémonos y disfrutemos de la maravillosa experiencia de la paternidad/maternidad, de un modo consciente y pleno.

Beatriz Montesinos
Madre “atenta” y “con talento”


Quiero dar las gracias a Beatriz por su aportación ya que considero de urgente necesidad que empecemos a ejercer una paternidad basada en una atención plena y consciente. Para ello debemos centrarnos "en el ahora" pues muchas veces se nos escapan "momentos" por estar proyectándonos en un futuro que no existe o en un pasado que no volverá...

Te recomiendo que visites aquí la web de Beatriz Montesinos para que conozcas con mayor detalle su proyecto "Con TIC y corazón".

Espero que te haya resultado interesante esta entrada y el artículo de Beatriz. Te agradecería mucho que lo compartieras con tus amigos en Facebook y Twitter. Además, espero tus aportaciones y comentarios.

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1 comentario:

  1. Gracias a ti, Óscar por tu confianza, y por abrirme éste, tu espacio, para poder hablar de una técnica que es realmente beneficiosa en todos los niveles: psíquico, físico y en las relaciones con los demás,sobre todo con nuestros hijos que son nuestro mayor tesoro.
    ¡Un enorme abrazo atento y consciente!

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