Somos padres y madres antes de que nuestro hijo nazca. La educación se inicia mucho antes del nacimiento no solo por la influencia que el niño percibe durante el periodo de gestación sino por las ideas previas que los padres tenemos sobre cómo lo vamos a educar.
Una de las preguntas que suelo plantear a las madres y los padres que asisten a mis cursos y seminarios de la Escuela de Padres con talento es la siguiente: "Y tú, ¿cómo educas?" Entonces iniciamos un proceso de reflexión y análisis conjunto en el que las madres y los padres intentan reconocer e identificar cuál es su propia forma de ejercer la educación con sus hijos, o lo que es lo mismo, cuál es su estilo educativo.
Se han hecho muchísimas clasificaciones de estos estilos educativos o de crianza. Es importante destacar la importancia de estos estilos educativos ya que el estilo que adoptamos influye en el desarrollo de nuestros hijos y determina la adquisición de diversos hábitos.
Las madres y los padres estamos cansados y saturados de teorías pedagógicas y lo que buscamos son herramientas útiles y válidas que nos ayuden en nuestra tarea educativa diaria. Por este motivo cuando planteo este tema siempre me gusta que los padres lo analicen desde una perspectiva real y práctica identificando el estilo que suelen emplear para saber de qué forma actuamos con nuestros hijos y hacia dónde nos hemos de situar. Veamos detenidamente las características de los diferentes estilos de crianza:
1. ESTILO EDUCATIVO PERMISIVO
En este caso no hay normas, todo vale: no hay horarios, ni exigencias, los hijos toman sus propias decisiones, etc. Lo importante es "que el niño no moleste, mientras yo esté tranquilo..."
¿Qué ocurre si actuamos de esta forma?
- Aprenden a hacer lo que le da la gana y no entenderán un NO por respuesta.
- Serán poco responsables y evitarán cualquier esfuerzo.
- No serán capaces de controlar sus impulsos y deseos inmediatos.
- Serán inmaduros y rebeldes.
2. ESTILO EDUCATIVO AUTORITARIO
La forma de actuar se resume en esta frase: "Se hace porque lo digo yo".
Aquí se da todo lo contrario que en el anterior, hay un exceso de normas muy claras y se establecen consecuencias desproporcionadas si no se cumplen. Son padres muy controladores que muestran poco afecto y llegan a hacer uso de la fuerza para que los hijos obedezcan (llegando a al agresión verbal e incluso física).
- El niño no aprenderá a distinguir lo que está bien de lo que está mal, simplemente aprenderá a obedecer y cumplir tus órdenes.
- Crecerán con miedos, inseguridades y falta de iniciativa personal.
- Tenderán a la impulsividad y la agresividad.
3. ESTILO EDUCATIVO SOBREPROTECTOR
Esta forma de actuar podemos resumirla en la siguiente frase: "Cuidado con eso que te vas a hacer daño..."
Son padres que suelen impedir a sus hijos realizar diversas actividades que podrían hacer perfectamente por sí mismos: ducharse, vestirse solos, etc. porque según ellos sus hijos no saben hacerlo solos. Establecen una dependencia excesiva por lo que el niño siempre necesitará de la presencia de un adulto para sentirse seguro.
- El niño no aprenderá a hacer nada por sí mismo, siempre estará esperando a que alguien lo haga por él.
- Crecerá con una serie de miedos, carencias y sobre todo inseguridades: jamás se verá capaz de hacer nada por sí mismo.
En inglés se conoce como "authoritative" que significa "autoridad justa". Se suele traducir como democrático. Lo podemos resumir en la siguiente frase: "Voy a enseñarte a que te desenvuelvas por ti mismo." De esta forma, los padres contribuyen a que el niño madure y se desarrolle plenamente aprovechando la disciplina como una oportunidad para educar estableciendo normas y límites proporcionados.
¿Qué ocurre si actuamos de esta forma?
- Promoveremos en el niño un ánimo optimista, alegre y valiente.
- Formaremos niños seguros de sí mismos.
- Los niños maduran social y emocionalmente, algo de especial importancia.
Lo más importante de todo esto que he mencionado es de qué forma llevamos todo esto al terreno práctico una vez ya conocemos los diferentes estilos educativos. Como muy bien afirma José Antonio Marina "Detectar cuál es nuestro estilo educativo es una de las mejores herramientas para conocer cómo educamos realmente. En qué aspectos funcionamos y en cuáles necesitamos mejorar de acuerdo con nuestros objetivos y con las necesidades de nuestro hijo."
Si lo analizamos con detenimiento nos daremos cuenta de que no llevamos a cabo ninguno de estos estilos de manera "absoluta", es decir, vamos oscilando de unos a otros. Lo realmente importante es que los miembros de la pareja podamos aunar criterios. Para actuar de manera equilibrada, la pareja establecerá acuerdos básicos a la hora de educar a los hijos con el objetivo de no transmitir mensajes contradictorios a los hijos que lo único que consiguen es confundirlos. Los padres tenemos que actuar siempre como un auténtico EQUIPO EDUCATIVO.
En otro artículo hablaré con detenimiento sobre cómo establecer esos acuerdos básicos entre los miembros de la pareja tal y como lo abordamos en la Escuela de Padres con talento.
Para finalizar te planteo la pregunta que da título al post: "Y tú, ¿cómo educas?", ¿con qué estilo educativo te sientes más identificado?
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Gracias por escribir esto. ¿Usted cree que el personal se plantea cómo educa? Quienes van a sus cursos "ya son responsables"; los relavistas "¿Para qué vamos a ir?", se preguntan; los autoritarios, "¿Qué me va usted a enseñar a mí que nosotros no sepamos", te espetan; los sobreprotectores, por pusilánimes, verán en usted al padre de unos niños que no son los suyos... ¡de ellos! En fin. Ánimo. Ahí están las maestras yanquis asesinadas como ejemplo de lo que es educar y dar la vida por el amigo. Con afecto.
ResponderEliminarMuchas gracias por su acertado comentario. Hay muchas familias concienciadas que sí se plantean de qué forma educan. Nosotros desde la Escuela de Padres con talento intentamos ofrecerles unas pautas y herramientas para ayudarles en su tarea educativa diaria. Estoy convencido de que el número de "padres responsables" va a ir creciendo, pero tenemos que poner todos de nuestra parte. La verdad es que lo de las maestras asesinadas es un ejemplo de "darse a los demás". Esto también hay que educarlo y transmitirlo a nuestros jóvenes y niños que son el futuro de la sociedad.
EliminarValioso material para padres, maestros, escuela y sociedad en general. Destaco el papel de una Escuela de Padres con talento (de hecho, el solo nombre ya dice más que Escuela de Padres a secas), pues los maestros que pretenden lograr cambios en la conducta de niños y jóvenes sin el concurso de los padres ignoran que la familia es la primera escuela. Al respecto, no sobra recordar la sabiduría de los indios paeces de Colombia: "Hay que educar primero a los padres, luego a los maestros y, si queda tiempo, a los niños".
ResponderEliminarY no creo que estuvieran sentenciando esta idea con ánimo evasivo.
Gracias por compartir ideas tan útiles.
Saludos.